La mayoría de veces puedes pensar que con el simple hecho de utilizar una disciplina o técnica, en un momento y lugar adecuado, tus problemas, tus aflicciones y tus tensiones desaparecerán inmediatamente.
Esto en ocasiones puede suceder, pero te has preguntado…¿cómo aprovechar al máximo esos espacios, esos métodos de meditación que ayudan a relajarse y a conocer el cuerpo, con una técnica igual de gratificante y sencilla?
Disciplinas como el Yoga, que trabajan satisfactoriamente la salud del cuerpo, ejercitando la mente y activando todas las funciones del organismo, pueden ser mucho más interesantes y productivas si la combinas con otras terapias.
Éstas, se respaldan en el uso de los aromas para influir en tu estado emocional y optimizar así el momento en que decides prepararte para el yoga.
Con la aromaterapia puedes respirar mejor y relajarte, te ayuda a sosegar tus sentidos y emociones, aclara tu mente, te permite afrontar con mayor serenidad los contratiempos de cada día, disipa los pensamientos negativos, te ayuda a centralizarte con mayor facilidad en una situación o decisión, entre otros.
Basta con aprovechar el placer de los aromas y la aplicación directa de los aceites naturales, o con el simple hecho de ambientar el espacio donde decides realizar tus ejercicios mentales y corporales.
La aromaterapia y sus técnicas de meditación, enriquecerán aún más esa disciplina que practicas continuamente. Y lo ideal es que podrás alcanzar sus beneficios al mismo tiempo que ejercitas tu cuerpo, con el Yoga.