El aceite esencial de albahaca es un aromatizante natural que ha sido usada desde la época del Imperio griego, en la que se usaba para la realización de perfumes. De hecho, muchas culturas usan este aceite junto con la mirra y el incienso para embalsamar cuerpos.
El aceite esencial de albahaca se usa para tonificar, para curar procesos de gripe o constipado así como para favorecer la digestión. Una de las propiedades de la albahaca es ser una buena cura contra la ansiedad y estados de fatiga o depresión por nervios.
El aceite esencial de albahaca ha de usarse para realizar baños de vaho en el caso de constipados, gripes y bronquitis. Para tonificar la piel sólo hay que añadir unas gotas de aceite de albahaca al agua de la bañera. Si lo que queremos es relajarnos, lo mejor es que nos den un buen masaje con aceite esencial de albahaca. Combinado con otros aceites, como el de tomillo, es un gran antiséptico.
El aceite de albahaca está especialmente recomendado para personas que padezcan agotamiento intelectual, por lo que es muy bueno para estudiantes en época de exámenes. Además, nos ayuda a evitar el insomnio y nos hace las digestiones más fáciles. Es decir, la albahaca lo que consigue es que aplaquemos los nervios.
El aceite de albahaca está desaconsejado para dos tipos de personas: aquellas que padezcan depresión, y mujeres embarazadas. Está demostrado que la ingesta continuada de albahaca es perjudicial para las personas deprimidas, ya que actúa en el cerebro de una forma parecida al alcohol.
Las mujeres embarazadas no deberían tomar aceites esenciales ya que éstos acabarían en el torrente sanguíneo del feto en unas cantidades superiores a las que él podría soportar.