Nunca antes hemos estado sometidos a tanto estrés de diferentes orígenes como ahora empeorando nuestra salud y bienestar, no haciendo dietas y no utilizando aceites esenciales que tanto nos pueden ayudar.
Funciones normales como el respirar o digerir la comida y factores externos a los que estamos expuestos en nuestro diario vivir como la polución, la radiación solar, el tabaco, el estrés, producen radicales libres.
Estos radicales libres son átomos que tienen un electrón sin pareja, mientras su estado natural es estar emparejados. Y así empieza nuestra telenovela química, el átomo con el electrón sin pareja busca emparejarse y roba un electrón de otro átomo que ya estaba emparejado dejando a ese electrón solo que ahora sale a quitarle la pareja a otro átomo y así sucesivamente, creando así, una reacción en cadena que se conoce como oxidación o envejecimiento. Pues si, cuando envejecemos nos estamos oxidando…
Este proceso de oxidación también ha sido relacionado a enfermedades degenerativas como el cáncer y la artritis entre otras.
Pero nuestra sabia naturaleza nos ha puesto al alcance de la mano los elementos para demorar este proceso. Las frutas y las verduras de colores brillantes están llenas de sustancias cuyos átomos contienen electrones adicionales disponibles a emparejarse con los pobres solitarios, y desesperados por encontrar pareja, radicales libres.
Los antioxidantes se miden con un sistema, desarrollado por el Instituto Nacional de Envejecimiento en Baltimore, Maryland, cuya unidad de medición se llama ORAC (Capacidad de Absorción de Radicales de Oxigeno) que indica la actividad antioxidante de una sustancia o producto y, por tanto, su capacidad para prevenir el envejecimiento.
Se recomienda el consumo de 3,000 a 5,000 ORACs al día que equivalen a 5 a 9 porciones de frutas y verduras. No todos los estudios concuerdan con cual es la fruta que más ORACs tiene pero si coinciden en quienes ocupan los primeros puestos.
El cacao como chocolate oscuro disputa el primer puesto con las ciruelas pasas y con los arándonos azules. En general, las bayas son una buena elección. El aguacate, la zanahoria, el tomate, las uvas, todos son buenas opciones para agregar a su dieta diaria.
La mejor forma de consumir antioxidantes es por medio de la comida pero si no está seguro de que va a consumir la variedad y las porciones necesarias use suplementos. Otros nutrientes como las vitaminas A (proveniente de beta-caroteno que es la versión no tóxica), C y E son antioxidantes.
Minerales como el zinc, el selenio y el magnesio el aminoácido glutatión y la coenzima Q10 también cumplen funciones antioxidantes.
Empiece ahora a parar el efecto del tiempo disfrutando de ricas ensaladas de verduras y de frutas, de diferentes colores (de cafés, azules y verdes, a rojos, anaranjados y amarillos), acompañadas de un buen vaso de vino…y para finalizar, un trozo de delicioso ¡chocolate!
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“La salud no es conocida hasta que es perdida” “El que bien come y bien digiere, sólo de viejo se muere”
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